
Compe de bloque en novelda

Edurne en Benidorm

Después de unos pocos días de volver de Shisha Pangma, ayer 27 de octubre, Edurne Pasabán visitó la Marina Baja para presentarnos su conferencia "Una Mujer al Filo de lo Imposible" en la que contaba su expedición al Dhaulagiri.
A pesar de ser un audiovisual para todos los públicos, carente de referencias técnicas o imágenes de escalada fue muy interesante sobretodo por la personalidad y cercanía de Edurne con el público asistente, en su gran mayoría de la tercera edad. Como ella mismo dijo, "He hecho una visita relámpago a mi pueblo y resulta que medio Tolosa está aquí. ¡¡Estamos en Benidorm !!
Comentó la preparación, desarrollo y pormenores de la expediciones, como los problemas con los porteadores o la espera de las ventanas de buen tiempo; y contestó con gra

En fin, un buen rato en compañía de esta excelente alpinista. A ver si nos la cruzamos por Sella, el Puig Campana o el Penyon d'Ifach que es donde suele escalar cuando viene por aquí.
Si quereis saber más sobre ella visitar su web
http://www.edurnepasaban.com
Encadenes
Ahí va un adelanto:
(Canta que te sabes)
... y el friki - friki se baila así:
¡UNO!... Ergometria
¡DOS!... La Watermark
¡TRES!... Mediterraneo
¡CUATRO!... La Romocop
El blog de Roberto
Nuevo fichaje

Orlú '08
Todo comenzó con una guía que compró Ivan en Barrabes donde aparecia una pirámide de granito en el Pirineo francés. Muchos metros equipados con parabolt y un bonito lugar donde pasar una semanita.
Y así fue: nuestros hermanos mayores pasaron a recogernos por Rodellar y emprendimos la marcha. La primera parada fue en Benasque. La idea era presentarnos a la mismísima Salenques, cresta que sube al Aneto y que requiere unas cuantas horas de actividad. Pero la suerte no estaba de nuestro lado. En solo media hora de pateo me salieron las ampollas más grandes del mundo mundial debido al roce de las malditas botas de montaña. Todo el verano en chanclas por Rodellar me ha dejado el callo flojo y esas botas últimamente no las he usado mucho.
Con este proyecto tirado por los suelos pusimos rumbo a Orlu a ver si teníamos más suerte. Este paraje se encuentra a unos 30km de Pas de d’Orlu. Ese era nuestro nuevo objetivo.
El primer día fuimos a la zona de los bordillos a familiarizarnos con el granito y la placa tumbada. Después de una empinada aproximación nos plantamos en la base de la pared. Ya nos habían avisado unos catalanes de unos desprendimientos que había habido por la zona aunque no esperábamos encontrar una parte de la ladera arrasada por los grandes bloques que debieron caer. Debían tener el tamaño de un autobús.
Intentando evitar esa precaria zona, estuvimos probando vías de 2 o 3 largos para ver como nos manejábamos. Tuvimos que apretar más de lo que pensábamos en los V+ de granito. La lluvia llegó puntual a su cita de las 6 de la tarde y no pilló en el último rapel, así que vuelta a la furgo.
El día siguiente cambiamos el casco y la doble cuerda por la colchoneta y nos fuimos a buscar una zona de bloques que sabíamos que andaba por allí. Después de dar unas cuantas vueltas y unas llamadas telefónicas dimos con el sector. Nos subimos a unos cuantos bolos pero de nuevo la lluvia hizo acto de presencia y decidimos hacer un poco de turismo.
Esto nos llevó a Ax des Thermes. Un pueblo cercano a Orlú en el que descubrimos el por qué de su nombre. Una fuente llenaba una terma a 76º donde la gente se sentaba a remojar los pies y los niños algo más que los pies. Nosotros no fuimos menos; una lavadita de pies, una caña a precio de oro y a la furgo.
A la mañana siguiente atacamos
Para rematar la faena nos volvimos a pasar por la zona de bloque para apretar lo que no pudimos el día anterior por la lluvia.
Cuando los tendones nos dijeron ¡basta!, recogimos los bártulos y emprendimos el camino de vuelta a casa. Ya llevábamos encima muchos kilómetros y muchos días de hippismo aunque no nos hubiese importado seguir un mesecito más.
Un abrazo y buenas escaladas.